El esplendor económico de Ribadeo en el pasado o la proliferación de construcciones indianas son algunas de las razones que explican la riqueza de su patrimonio cultural y la declaración de su núcleo antiguo como BIC en 2004. Aquí tienes un pequeño resumen de sus manifestaciones más relevantes y la posibilidad de emplear un buscador para ampliar información.

Comenzando por el patrimonio arqueológico, en el municipio se identificaron ocho localizaciones relacionadas con la cultura castreña (VI aC-IV dC), tanto en la costa como en el interior, aunque no fueron ocupadas de manera simultánea. Entre ellas destaca el castro de las Grobas, que está cerca de Insua, en la parroquia de Vilaselán. Mucho más antiguo es el yacimiento paleolítico de Louselas que es posiblemente el depósito más antiguo de la cornisa cantábrica, puesto que se le estima una antigüedad de 300.000 años. Los útiles hallazgos (más de 200 por ahora) son sobre todo bifaces, raspas y otras herramientas elaboradas con cantos rodados de la Ría.

Uno de los vestigios más importante de los hallados en esta comarca es el diadema de Ribadeo, que se considera como uno de los restos más importantes de la orfebrería castreña peninsular.

Cronológicamente, el edificio religioso más antiguo de los conservados en el concello de Ribadeo es la capilla de Atalaia ya que, a pesar de las alteraciones de las que fue objeto a causa de su reconstrucción a comienzos del siglo XX, data del siglo XII. Otros de los edificios emblemáticos del patrimonio religioso ribadense son el santuario de las Virtudes (Arante) y el convento de Santa Clara (Ribadeo). El primero, que pertenece al siglo XIV, conserva bastantes elementos medievales y un magnífico conjunto de pinturas murales que reflejan episodios de la vida de María. El segundo, conserva como partes más antiguas su iglesia de nave única, del XV, y un hermoso claustro del XVIII.

Los pazos conforman el conjunto más relevante y numeroso del patrimonio civil ribadense, la mayor parte de ellos concentrados en su villa. Uno de los más antiguos es lo de Cedofeita, fundado por Lope García de Cedofeita entre finales del XV y comienzos del XVI y rodeado por un recinto amurallado. Ya en el siglo XVIII fue construido en el centro de la villa, al lado de la antigua fortaleza medieval, el pazo de Ibáñez, hoy sede de la casa consistorial ribadense. Destaca también lo de Quinta Larga, en Santalla de Vilausende.

Fue a comienzos del siglo XX cuando se irguió el que hoy es el edificio más representativo de Ribadeo, construido en 1905 por dos hermanos emigrantes y bautizado como la torre de los Moreno, por ser este el elemento que más destaca de la construcción.

En el campo del patrimonio militar el castillo de San Damián, construido a comienzos del siglo XVII a pocos metros del mirador del Cargadoiro por el marqués de Cerralbo, es el mejor ejemplo de esta arquitectura en el ayuntamiento.